Hizo las Inferiores en Unión de Sunchales y desde chico mostró pasta de goleador, casi siempre como 9 aunque de chico también jugó como armador y hasta se puso los guantes porque era bueno para atajar penales. Con solo 15 años, el técnico Rubén Forestello, que condujo a Patronato durante la Temporada 2016/17, lo subió al plantel de Primera. El objetivo era que el Principito (así le decían) ganara ritmo y roce con los más grandes: anduvo tan bien en las prácticas que el Yagui lo mandó a la cancha.
Con 18 años, ya como titular indiscutido del equipo, el nombre de Soldano comenzó a sonar en varios clubes. 22 goles entre Argentino B y Copa Argentina. "Siempre estaba muy bien ubicado en los centros, sabía en qué momento picar al primer palo o al segundo y tenía buenos movimientos adentro del área", destaca Matías Rojo, ex compañero en la Primera de Sunchales. Damián Bartizaghi, amigo de las Inferiores, agrega: "Le tirás un ladrillo y lo cabecea". Se habló de Rafaela, de Unión Española y hasta de un interés de Italia, pero finalmente llegó a Unión de Santa Fe junto a Lucas Gamba, quien estaba en Independiente Rivadavia.
Al Tatengue llegó en 2014: jugó 85 partidos y anotó 23 goles. Su mejor temporada fue la 2017/18, en la que hizo 11 tantos y quedó a dos de Lautaro Martínez y Sebastián Ribas y a seis de Santiago García, el goleador del torneo. Sus definiciones tienen un denominador común: a uno o dos toques, siempre cerca del arco rival, atento para dar la estocada final.
Hay un dato estadístico que lo destaca por encima del resto y demuestra su potencia en el cabezazo. En la última Superliga terminó como el jugador con más duelos aéreos ganados, con 277, un dato que toma mayor relevancia si se tiene en cuenta que jugó solo seis meses en Argentina y luego se fue al Olympiacos de Grecia. En segundo lugar quedó Mauro Matos, con 248, y tercero fue Gabriel Ávalos, entonces en Godoy Cruz y actualmente en Patronato.
Sin hacer demasiado ruido, Soldano ya tiene todo arreglado para sumarse a Boca a cambio de 300 mil dólares por un préstamo con opción de compra de 5 millones. Después de seis meses con poca actividad y un solo gol en Olympiacos, el desafío será recuperar su mejor versión y ganarse un lugar en el equipo titular de un plantel plagado de estrellas.
