Los dirigidos por Ariel Holan, campeones de la edición 2017, se habían llevado una ventaja tranquilizadora luego del 4-1 en Avellaneda, pero en suelo incaico tampoco pasaron grandes sobresaltos y la clasificación no corrió riesgo alguno en ningún momento de los 90 minutos.
Así, el Rojo quedó entre los 22 equipos que ya tienen un lugar asegurado en los dieciseisavos de final del torneo continental y esperará el sorteo para conocer a su próximo rival. Con la goleada, se aseguró evitar a los que caerán desde la Libertadores (los terceros de la fase de grupos) y definirá la siguiente instancia como local.