Claro que el servicio también resultó un aliado del argentino: anotó 13 aces y un 85% de puntos ganados con el primer saque. Asimismo, consiguió 47 tiros ganadores (20 de ellos de drive). Apoyado por una buena cantidad de latinos -argentinos y colombianos, sobre todo-, Mayer pudo haber triunfado en tres sets, cuando falló un sencillo smash que lo hubiera adelantado 6-5 y 40-15. Sin embargo, padeció unos minutos de imprecisión, que aprovechó el europeo. De todos modos, en el cuarto set el Yacaré crispó el puño, se serenó, aceleró en los momentos clave y en una ráfaga de solamente 26 minutos hizo añicos cualquier esperanza del finalista de París Bercy 2012.
Mayer, en la próxima rueda, se medirá con el croata Marin Cilic (9° favorito), vigente campeón del US Open, que superó por 7-6 (3), 6-1 y 6-1 al italiano Andrea Arnaboldi, proveniente de la clasificación. Mayer y Cilic, un jugador de la generación de Juan Martín del Potro, se enfrentaron en solo una oportunidad y fue, precisamente, en la tercera ronda en Bois de Boulogne. El croata triunfó en el quinto set.