El año pasado, la terminal aérea había cerrado en marzo por la pandemia de coronavirus y luego, en agosto, para el inicio de obras de mejora financiadas por el Fideicomiso de Fortalecimiento del Sistema Nacional de Aeropuertos que administra el Ministerio de Transporte y ejecuta el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA).
Se agregaron 615 metros de pista y 20 de ancho, lo que permitirá optimizar las operaciones regionales y mejorar la seguridad y la conectividad con el exterior, por lo que la pista pasó de los 2.100 metros actuales de largo y 40 de ancho, a 2.715 de largo con un ancho de 60 metros.
Las obras demandaron una inversión de unos 5.000 mil millones de pesos y fueron llevadas adelante por Aeropuertos Argentina 2000.