"Se abrió en plena curva para pasar a un automóvil Renault 12 que iba en el mismo sentido y ahí se inclinó hacia el costado izquierdo, chocó contra el cerro lindero y volcó", indicaron.
Ese vaivén "fue el que produjo que los viajeros abordo, que iban sin cinturón de seguridad, se inclinaran hacia un costado del micro y murieran aplastados", explicó un alto jefe de Vialidad. Mientras avanza la investigación, varios testigos indicaron que el chofer gritó "que se había quedado sin frenos" minutos antes del vuelco, tal cual declaró Claudio Sosa, quien estuvo internado tras sufrir una lesión en su cabeza, de acuerdo al relato de su hermano.
Diego Molina, integrante de la asociación Conduciendo a Conciencia, señaló que "la presencia del Estado es importantísima" para la prevención de accidentes, pero además "hace falta un cambio cultural para prevenir estas muertes".
En tanto fue dado de alta Jorge Pinelli (55) chofer y padre del conductor fallecido, cuyo testimonio será clave dado que iba en la cabina del micro junto a su hijo en el momento del accidente. Pinelli podrá contar a la justicia qué fue lo que pasó y por qué iba excedido en la velocidad, ya que se estableció que en el momento del accidente el ómnibus superó los 60 km/h cuando la máxima permitida en la Cuesta de los Terneros, donde ocurrió el vuelco, es de 30 kilómetros por hora.