La investigación iniciada hace más de dos meses permitió desbaratar esta pequeña organización que se amparaba en el emprendimiento rural de la familia de ambos hermanos, dedicada a la plantación de verduras y hortalizas.
El policía de 22 años detenido es de jerarquía oficial de policía y prestaba servicios en la comisaría decimocuarta de Sierra de los Padres. Ahora la Justicia investigará cuál era su rol y hasta que punto conocía la actividad ilícita y no la había denunciado.
Los tres detenidos controlaban el negocio del cultivo de cannabis sativa y utilizaba lo más valioso de la planta, que son las flores o cogollos, mientras que con el tallo y ramas hacían ladrillos compactados para su posterior venta.
Precisamente este jueves se secuestraron 16 ladrillos de marihuana secada y compactada por un total de 11 kilogramos, mientras que las plantas que se hallaron superaron las 50 por un peso de aproximadamente 70 kilogramos.