La determinación del gobernador Greg Abbot le permite al gobierno federal proporcionar "asistencia pública, asistencia financiera y asistencia para mitigar los riesgos".
La tormenta, que pasó convertirse en un huracán de categoría 1, intensificó rápidamente la velocidad del viento en las últimas 24 horas.
Mientras que una advertencia de huracán continuaba vigente de Port Mansfield a Mesquite Bay, otra de marejada ciclónica (que implica posibles oleadas de agua de la costa con riesgo mortal), abarcaba desde Port Mansfield hasta Sargent, informó el sitio de CNN.
Se trata de posibles mareas de tormenta de hasta 1,5 metros en algunas áreas, incluida la Bahía de Corpus Christi.
En tanto, se pronosticaban fuertes lluvias de 30 a 60 milímetros en el sur de Texas y los estados mexicanos de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas hasta el domingo por la noche.
"Hanna" se adelantó a la temporada habitual de huracanes, que se da en las primeras semanas de agosto.
Es el primer huracán en azotar a Texas en el mes de julio desde Dolly, en 2008.
Por el momento, se informó un daño estructural significativo en Port Mansfield, a unos 96 kilómetros al norte de la frontera de Texas con México, según la oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Brownsville.
En esa zona, se registraron ráfagas de viento de 133 kilómetros por hora en el área y ráfagas de 165 kilómetros por hora en la pared occidental de la tormenta según la observación de Rincón De San José.