"Empecé con dolores de parto a las 8 de la mañana. Me traía mi cuñado en el auto y en San Martín mi hijo quiso nacer", contó Ariana, la mamá de Bastián, que está internada en la maternidad del Roque Saénz Peña junto a su mamá en buen estado.
"Enseguida paró la policía, vino la ambulancia y me ayudaron a tener mi bebé", contó la mamá feliz.
"Ibamos en el auto cuando le empecé a decir a mi marido ¡pásate para atrás! ¡pásate para atrás!, porque sale el bebé. No querían frenar primero, pero frenaron y lo agarraron justito", relató.
Por su parte, Angel, el orgulloso papá, también contó como vivió ese momento. "Lo único que hice fue bajarle el pantalón y ya ahí se vio su cabeza y empezó a salir", contó, antes de agregar que "la policía y la doctora que estaba en la ambulancia me ayudaron. Por eso estoy agradecido a Dios y a esa gente que dio el apoyo en el momento justo".
"Esto no me lo voy a olvidar nunca más", relató emocionado y casi al borde de las lágrimas.
Incluso contó que hasta "un taxista que estaba ahí se puso a filmar el parto. Es algo tremendo no lo puedo entender todavía".
"Mi esposa me llamó al trabajo, tenía que venir en bicicleta y pensaba que no llegaba porque estaba lejos. Venía pensando que mi esposa iba a tener el bebé en mi casa. Tenía algo de idea de cómo era el parto por las series que ella miraba y me dije voy a tener que hacer esto", contó a El Tres TV, ya más calmado y sin la adrenalina que la había tocado vivir varias horas antes. (La Capital)