La jueza resolvió que el joven permanezca privado de la libertad bajo la modalidad de arresto domiciliario, con una serie de restricciones a cumplir. Una vez cumplido el plazo, el 10 de diciembre, recuperará la libertad ambulatoria con las restricciones de rigor. El imputado cumplirá la medida de restricción en su domicilio en Viale, en la misma vivienda en la que su familia posee un negocio dedicado a la comercialización de neumáticos ubicado en la planta baja, por lo que sólo podrá bajar a trabajar con su padre sin poder abandonar el inmueble.
En la audiencia, la querella particular, a cargo de Diego Gastaldi y Mauro Vogel, y el agente fiscal Ignacio Aramberri, pidieron que se prorrogara la prisión preventiva por 30 días más, con el objeto de producir nueva prueba. Los querellantes, si no se acordaba la realización de un juicio abreviado, fundaron su pedido en la peligrosidad del imputado y en la conmoción social que causó consternación en María Grande, lo que pondría en riesgo la salud física del imputado y la seguridad de terceros.
Por su parte, la defensa, a cargo de Raúl Avero y Héctor Cardona, rechazaron el pedido porque entendieron que no se dan los supuestos objetivos para que se extienda la prisión preventiva, añadiendo que son subjetividades, no vemos la presunción de fuga.