El reputado gastroenterólogo, extitular del Hospital de Clínicas, fue cauto para no quebrar el secreto de sumario que pesa sobre la causa. Y agregó que el único resultado concluyente hasta el momento de la autopsia es que la periodista falleció.
Consultado sobre si existen casos de perforaciones realizadas durante una endoscopía en las que se salva el paciente opinó que "no es necesariamente mortal". Y que depende de qué tipo de perforación sea: el tamaño, el lugar donde se produce y varios otros factores. "Hay grandes perforaciones que se pueden subyugar y otras más pequeñas que no", indicó. Reiteró que es muy raro que un endoscopio pueda producir perforaciones. "Tiene que haber algún cuadro previo, tocar algo muy frágil, una imprudencia o muy mala suerte".
¿Y se puede romper un endoscopio? Para el médico es muy difícil que suceda, salvo que lo utilice un endoscopista que no sabe operarlo.
Recién cuando esté concluida la anatomía patológica, el 16 de febrero, podrán confirmar si lo que observaron los peritos el día de ayer es cierto o no.
Respecto de la anestesia utilizada en el procedimiento, explicó que se trata más bien de una sedación muy corta, y que la droga que se utiliza es el propofol, que se va del organismo muy rápidamente.
"Esto se hizo en un lugar apropiado con todas las reglas, estaba en un sanatorio, a lo mejor no hubo tiempo debido a la dureza del cuadro", concluyó.