El satélite natural de la Tierra adquirirá su apogeo; será la luna llena más grande y brillante del año. Según los astrónomos, aparecerá en el cielo el próximo diez de agosto. "Es una mala noticia para las Perseidas", informa Bill Cooke, de la Oficina de Medio Ambiente sobre Meteoritos de la NASA.
Lo habitual en las Perseidas es poder ver unos 100 meteoros por hora, pero tendrán que competir con una luna llena un 14% más grande y un 30% más brillante de lo normal. "El resplandor lunar borra el telón de fondo negro aterciopelado requerido para ver meteoros débiles y reduce drásticamente los rastros", añade Cooke.
La Nasa publicó en Youtube su vídeo 'Perseidas contra Superluna', que explica ilustrativamente cómo coincidirán los dos fenómenos.
Los meteoros de las Perseidas procederán del cometa Swift Tuttle, que cada 133 años emprende un viaje a través del sistema solar interno dejando tras de sí una huella de polvo y arena. Cuando la Tierra pasa a través de la zona de escombros, las partículas del cometa golpean la atmósfera, desintegrándose a continuación y dejando los brillantes destellos de luz que disfrutamos en el cielo.