“Lo primero que pensé fue que no iba a soltar el maletín”, confesó Pittia y explicó que el bolso, además, contenía medicación de él porque es diabético e insulino-dependiente; en el portafolios también se encontraban los elementos con los que se mide el azúcar en sangre. Pittia fue socorrido por vecinos de barrio Las Flores, quienes cruzaron la calle y a los gritos ahuyentaron a los delincuentes. Mientras, uno de los testigos del hecho buscó asistencia en el centro de salud Carrillo y otro lo ayudó a cruzar la calle porque él iba ensangrentado y aferrado a su maletín. En la ocasión, se mostró “totalmente agradecido” de los vecinos que lo socorrieron “porque fui uno más que crucé caminando”.
“Después que pasó todo sentí mucha bronca, pero en el momento, lo que hice fue instintivo porque no pensé en defenderme. Después, en frío, me di cuenta que cada vez que me tiraba un puntazo, le aflojé el maletín sin largarlo y por eso el cuchillo no terminó en mi cuerpo”, repasó la víctima del intento de asalto. “Los delincuentes eran jóvenes de entre 19 y 22 años”, aseguró el hombre. El hombre debe curar rigurosamente sus heridas porque es diabético.-
(Elonce)