Policiales “Sentía que se me salía el ojo”

Desfiguraron el rostro a golpes a una mujer para robarle el celular en Paraná

Un ladrón la golpeó brutalmente para sustraerle su teléfono celular y se dio a la fuga. “Tenía el ojo en la ceja y no lo podía abrir”, aseguró la víctima a Elonce e imploró por “justicia para los que trabajamos”.
Una vecina de barrio Thompson de Paraná fue víctima de un violento asalto este lunes a plena luz del día; un sujeto, que se trasladaba en una moto de baja cilindrada, la golpeó brutalmente para sustraerle su teléfono celular y se dio a la fuga. La víctima del lamentable hecho de inseguridad aseguró a Elonce que estos episodios recrudecerán en tanto se sigan comprando elementos robados.

“Fue difícil e inesperado, pese a que ya hemos sufrido otros robos en la zona. Eran las 15.30 cuando estaba sentada tomando sol, tranquila y trabajando por celular, ya que hechos violentos mucho, en este último tiempo, no habían pasado”, relató María a Elonce. Y continuó: “Mi nena justo había salido con una vecina a hacer un mandado y cuando ellas llegaron a la esquina, este señor pasó en la moto por calle Pablo Lorentz y volvió despacito. Confiada, lo atendí de forma cordial pensando que necesitaba algo de la feria y le pregunté qué necesitaba… Me pidió el celular… Yo quedé anonadada no creía lo que estaba escuchando”. El hecho ocurrió a plena luz del día en zona de calles Moussy y Pablo Lorent, en inmediaciones de barrio Thompson.
“Quiero tu celular”, fueron las palabras que repitió el malviviente. A lo que la víctima le respondió: “No te lo voy a dar porque no es mío y lo estoy utilizando para trabajar”. “`No me importa´, me dice. Y me agarra del brazo izquierdo”, rememoró María al comentar que, al momento del hecho, ella se estaba limando las uñas y había quedado con la lima en la mano. “En ese momento, como este señor tenía el casco puesto y siempre hacía contacto visual, cuando baja la vista y me ve con la lima, me la arranca de la mano, se enfurece y yo conté tres piñas… Ahí me fui cayendo al suelo, vi blanco y no sé si me siguió pegando”, recordó.
El ladrón logró escapar y no fue identificado
Ante los gritos desesperados de María, los vecinos acudieron en auxilio y otros de sus hijos, que se encontraba en el interior de la casa, corrió al delincuente que huía a bordo de la motocicleta. “Mi hijo lo alcanzó, lo arrastró unos metros y alcanzó a sacarle el casco, pero se escapó y hasta el momento no sabemos quién sería esta persona”, indicó al confirmar que el joven “también tiene sus machucones por defender” a su madre.

El ladrón habrá tenido aproximadamente 35 años, de contextura mediana, ojos marrones oscuros y más de un 1.70mts no medía; se trasladaba en una moto negra Scooter de baja cilindrada, pudo saber Elonce. En el registro de la cámara de seguridad solo se vio la parte de atrás del hombre, por lo que aún no ha podido ser identificado.
Desfigurada
María aseguró a Elonce que, tras la golpiza, “sentía que se le salía el ojo”. “Una vecina que me asistió, con la cara que puso, ya me dijo todo”. “Tenía el ojo en la ceja y no lo podía abrir”, aseguró y agradeció a médicos y enfermeros del hospital por la asistencia, además del personal de comisaría octava. En el rostro de la mujer aún pueden verse los hematomas y, de acuerdo a lo que contó, después del ataque, también sufre de fotofobia en el ojo izquierdo.
“Justicia para los que trabajamos”
Al dar cuenta de su “impotencia” por el hecho de inseguridad, María solo pidió “justicia para los que trabajamos”. “Es una tristeza bárbara, porque el teléfono es algo material, pero no tiene por qué pasar esto. Porque todo pasa porque hay gente que compra celulares y cosas robadas, si no hubiera quienes los compran, no pasarían estas cosas”, apuntó al lamentar que “cada vez será peor”. (Elonce)
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS