
El vehículo, “tiene el vidrio del lado izquierdo roto y en el baúl tenía un certificado de discapacidad, ya que tengo problemas auditivos”, detalló el joven.

“Los delincuentes, tenían conflictos con el dueño de la casa y por eso se presentaron esa noche, querían prenderle fuego la vivienda. Eran unos tipos, junto a dos chicas, dos chicos y una señora con discapacidad. Nosotros en todo momento estuvimos adentro de la casa, porque los tipos tenían bidones de naftas y encendedor, y afortunadamente no nos pasó nada”, contó.
Martin, aclaró que “quisiera poder recuperar mi moto, pero lo que más me importa es la salud de mi hermana y que se recupere pronto. Le pido a las personas que donen sangre, porque salva vidas”.
