Respecto del hecho que se le endilga, el imputado dijo que del momento del hecho no puedo decir nada porque no tengo nada que ver y añadió: Trabajaba en blanco en Cotapa de 7 a 13, llegaba a mi casa, comía, y me acostaba a dormir la siesta. También dijo que no conocía a Cabral. Siegfried negó que le hayan pegado un botellazo en la cabeza, en referencia a testigos que manifestaron en el debate que un joven amigo de la víctima le arrojó una botella la tarde del crimen.
Alrededor de las 10, el Tribunal de la Sala II en la Cámara del Crimen de Paraná integrado por Alejandro Grippo, Marcela Badano y Elisa Zilli la fiscal Matilde Federik, los defensores José Iparraguirre y Leonardo Kunzi y el imputado Cristian Manuel Siegfried, alias Pestaña, llegaron a la esquina de las calles Regis Martínez y Barrenechea, en barrio La Milagrosa de Paraná, para realizar una inspección ocular en el lugar en el que Alejandro Cabral perdió la vida por el disparo de un arma de fuego. El objetivo era determinar las condiciones de visibilidad y la distancia que separó al agresor de la víctima y a estos de los testigos del crimen. Como era de prever, tanto la acusación como la defensa se fueron del lugar en que se realizó la medida judicial con visiones contrarias.
La jornada de ayer fue pródiga en cuanto a la realización de medidas procesales, porque a la inspección ocular se sumó que Siegfried prestó declaración indagatoria. Por esto, las partes acordaron, con la anuencia del Tribunal, postergar los alegatos para hoy a partir de las 10.