En el caso de la capital provincial recién esta semana se conoció que las salas de los Complejos Cine Rex y Cine Círculo volverán a recibir al público.
El empresario Antonio Álvarez adelantó que la fecha de reapertura será el próximo viernes 5 de marzo. Mientras, espera obtener la autorización oficial por parte de las autoridades de la comuna a los pedidos que formalizó para que la actividad pueda volver a funcionar. El trámite, confió, aún se encuentra “en una situación de stand-by”. Por otra parte, ya comenzó a activar la tarea de los equipos a cargo de los espacios para realizar los trabajos necesarios para dejarlos en condición de recibir el público.
El título previsto para el estreno de la reapertura es “Raya y el último dragón”, película animada de fantasía producida por los estudios Disney. El film se proyectará en Paraná a dos días de su lanzamiento global, previsto en Países Bajos, el miércoles 3 de marzo.
A este largometraje, añadió Alvarez, se agregará otro título en horario nocturno para complementar el programa.
En este regreso paulatino a la actividad, también apuntó, en relación a la cantidad de estrenos y títulos: “No propondremos una gran amplitud en la programación. Por ahora seremos cautos. Veremos la reacción de la gente, por lo menos en el arranque”.
La escasez de títulos para estrenar -pese al año transcurrido- se debe a la reticencia de las grandes productoras de comenzar a distribuir sus largometrajes en un panorama complicado en lo económico, ya que la pandemia y las medidas sanitarias a respetar, establecen límites en la cantidad de espectadores y, consecuentemente, en la venta de entradas.
En Paraná, asegura Alvarez, “el tema del aforo no es un problema. Hay espacio para que cada espectador pueda ubicarse a una distancia segura de otro en la platea”. Además aclara que en una primera etapa “pretendemos concretar dos funciones, a lo sumo tres por día, de manera que podamos cumplir protocolos, espaciar, ventilar entre una y otra. Y por supuesto cumplir con los procedimientos tanto para el ingreso como para la adecuación de los lugares.
En este punto consideró: “Entendemos que las disposiciones que se traducen en medidas y procedimientos que debemos cumplimentar –toma de temperatura corporal en el ingreso, distanciamiento, uso de tapabocas, y puestos sanitizantes- deben ser racionales y no una desmesura improbable de poder llevar adelante”.
Finalmente, en relación al costo de la entrada general, arriesgó que el valor rondará los 300 pesos por espectador.
