Luego de que la pequeña cayera dentro de la jaula, el oso solo se acercó a ella, la olfateó y se alejó. “Los trabajadores de la sección de depredadores reaccionaron rápidamente y comenzaron a atraerlo hacia una sección interior, donde no tardó en entrar”, anunció el zoológico a través de su página de Facebook.
La bebé fue rescatada y examinada por una enfermera, quien aseguró que sufrió conmociones cerebrales, cortes en la cabeza y hematomas por la caída, pero ni un solo rastro de heridas por los colmillos o las garras del oso. La mamá está arrestada y se enfrenta a una pena de 15 años por tentativa de homicidio.
“Una mujer joven arrojó a una pequeña al recinto de un oso pardo, frente a todos los visitantes. No estaba completamente claro cuál era su motivo. Tanto los visitantes como el personal del zoológico intentaron detenerla, pero fallaron. Tenemos miedo incluso de pensar cómo hubiera terminado esto si el oso reaccionara ante el niño pequeño como si fuese su presa”, explicó uno de los testigos.
A su vez, el zoológico reconoció: “Zuzu es un depredador equilibrado, que no tiene malicia hacia los humanos. Y queremos destacar el resultado del tratamiento adecuado por parte de nuestro personal, su actitud amable y cuidadosa con el oso. A su vez, recordaron cómo llegó el animal a las instalaciones: “Fue en el año 2017 y desde el principio fue querido por todo el equipo por su sociabilidad, su carácter juguetón y su apertura al público”.