Miguel Blesa, que al igual que Rato presidió la Caja Madrid entre 1996 a 2009, fue condenado a seis años de prisión. Otros 65 acusados también fueron condenados como colaboradores de la operativa que contribuyó a mermar el caudal de la entidad bancaria a través del las tarjetas visa black de la Caja Madrid y de la entidad financiera Bankia. Rato, Blesa y el ex director general de Medios Ildelfonso Sánchez Barcoj -condenado a dos años y medios por complicidad- fueron absueltos del delito de administración desleal que también pesaba sobre ellos.
Las penas para ambos directivos son similares a las que había solicitado la Fiscalía, en el caso que investiga el uso irregular de tarjetas de crédito por parte de antiguos consejeros y directivos de Caja Madrid y luego de Bankia, un grupo surgido de la fusión con otras cajas de ahorros.
Entre 1999 y 2012, los condenados, junto a los otros 63 directivos de Caja Madrid, gastaron con estas tarjetas más de 15 millones de euros en cuestiones personales.
Entre los gastos, se destacan 3 millones de euros en restaurantes, 2 millones en disposiciones de efectivo, más de 1,5 millones en desplazamientos y viajes, más de 1 millón en grandes tiendas, cerca de 800.000 euros en hoteles y unos 700.000 en ropa y accesorios.