La postal despertó especulaciones sobre si se trata de un bar real o si es sólo una fachada que emula el emblemático bar en el que Homero suele tomar alcohol hasta perder el conocimiento y en el que comparte con amigos para alejarse de su familia. Y la verdad es que se trata de una idea de Rubén Díaz, un arquitecto que informó que el lugar está pensado para que funcione como un departamento y que cuando esté listo se podrá alquilar.
"El alquiler va a costar cerca de $ 11 mil y todavía está en obra. La idea es que el interior también sea una réplica del bar a donde va Homero a tomar sus cervezas", contaron desde la inmobiliaria Sayago.
"Para un fanático puede estar muy bueno vivir en un lugar así. Igual no se descarta ver si el que lo alquila quiere usarlo para otra cosa, hablarlo y ver los permisos que se necesiten", aclararon.