Girona, que llegaba como único líder tras haber ganado 14 de los primeros 17 partidos, se puso en ventaja a los 39 minutos del primer tiempo cuando su goleador ucraniano, Artem Dovbyk, cambió penal por gol para sumar su tanto número 11, con el que se ubica como uno de los máximos goleadores del certamen.
Girona se encaminaba a otro triunfo, pero a dos minutos del tiempo cumplido, Pezzella encontró el segundo rebote de un tiro de esquina y con un derechazo poco ortodoxo venció la resistencia de otro argentino: el arquero Paulo Gazzaniga. En el final del partido, ambos buscaron el gol de la victoria que nunca llegó.
(TyC Sports)