La primera mitad tuvo como común denominador la paridad total. Si bien en los primeros 45 minutos el dominio de la pelota se inclinó levemente para los dueños de casa, quienes tuvieron las chances más claras de abrir el marcador, los de Simeone también contaron con opciones de gol y unos últimos 15 minutos donde fueron quienes mandaron en el verde césped del Bernabéu. No obstante, el marcador se mantuvo en un rotundo silencio hasta el segundo tiempo.
Primero, a los 18 minutos del complemento, Ángel Correa tuvo una reacción desmedida ante la pegajosa marca de Antonio Rudiger. El argentino le acertó un codazo en el pecho y el árbitro no tuvo otra opción de mostrarle la tarjeta roja.
Sin embargo, cuando el Colchonero parecía complicarse, Antoine Griezmann se hizo cargo de una pelota parada al minuto 32, arrojó un preciso centro a la cabeza de Josema Giménez, quien con un certero testado infló la red y sorprendió al local.
Pero como al Madrid hay que rematarlo una vez que está en el piso, los de Ancelotti se volvieron a levantar al minuto 39 y desde un tiro de esquina. El croata Luka Modric fue quien ejecutó el córner, la puso en el corazón del área y quien apareció fue la joya uruguaya Álvaro Rodríguez, quien también de cabeza dibujó cifras iguales en el marcador final.
