Empezó un poco mejor Arenas, lo empardó San Benito y Grinóvero cumplió con la ley de los partidos parejos. Esos que se abren por pelota parada ante la paridad existente. Con un gran marco de público, el encuentro fue intenso a pesar de que no se generaron muchas acciones de gol. Y cada uno con su libreto. Las de Benke con juego corto y buscando ser explosivas de tres cuartos de cancha. Las de Gianecchine no tuvieron mucho volumen de juego, pero fruto de la recuperación de pelota y buscando aprovechar espacios, también arrimó chances de gol.
La intensidad que reinó en el primer tiempo contrastó con lo ocurrido en el segundo tiempo. Arenas sintió el gol finalizando el primer tiempo y San Benito corrigió cuestiones defensivas, de tenencia de pelota en la mitad de la cancha y si bien no gravitó ofensivamente, aparecieron las pelotas paradas que parecían podían cerrar el match.
Y así fue. A falta de 10 minutos Petersen (ingresó en el segundo tiempo) lanzó un excelente centro al segundo palo y la defensora Demonte ganó de cabeza y desató la alegría para Sanbe. Arenas volvió a sentir el impacto, perdió aquella solidez y prácticamente se encomendó a la derrota.
Sobre el final Franco selló una excelente jugada colectiva (centro, izquierda y gol por derecha). Sanbe, acostumbrada en los últimos tiempos de llegar a instancias, festejó a lo grande, al caer la noche dominguera. Campeonas y con justicia.
San Benito, por ser campeona Oficial de la Liga Paranaense de Fútbol, se llevó 200.000 pesos en premios. En tanto que Arenas, por ser subcampeona, recibió de la LPF, 100.000 pesos. Los cheques fueron entregados por las integrantes del Comité Femenino de la Liga Paranaense de Fútbol, Mónica Mitre, Cristina Bescos y Viviana Hermosid.
