"Es la vez que más presión me metieron en mi vida", bromeó el defensor de Gremio, nacido en Concecpción del Uruguay, al ser consultado sobre su futuro y la posibilidad de jugar en otro equipo que no fuera el Ciclón.
"Tengo un cariño muy especial por San Lorenzo, me gustaría volver, es verdad, pero los tiempos de los clubes y los jugadores a veces no son los mismos", destacó Vikingo, y agregó: "Si puede ser San Lorenzo, mejor, pero veremos dónde es".
Además, el central de La Histórica analizó las diferencias que existen entre el fútbol brasileño y el argentino y reconoció que no hay una liga que sea mejor o peor que la otra, pero si que hay algunos puntos en las que difieren.
"Cada fútbol tiene sus particularidades. Acá (por Brasil) se juega mucho uno contra uno y en Argentina es más táctico. En Brasil la mayoría de las canchas son grandes y tienen otros condimentos. Lo que sabemos es que en ambos países hay grandes jugadores", explicó el uruguayense, quien sostuvo que en el Brasileirao hay mucho más jugadores desequilibrantes desde lo individual: "Acá hay 220 millones de habitantes. Levantás una piedra y sale un rápido y habilidoso. La genética que tienen es distinta a la nuestra", concluyó el Gringo.
