Durante el fin de semana, en PaÃses Bajos se vivió una situación insólita. Venlo, equipo de la primera división de fútbol cayó 13-0 ante Ajax en la goleada más abultada de la historia de aquel paÃs, donde el entrerriano Lisandro MartÃnez anotó un de los tantos. El guardameta Delano Van Crooij fue el principal portavoz de sus compañeros para poner en palabras sus sensaciones tras la humillante derrota.
"No puedes deshacerte de algo asà demasiado rápido. No creo que lo olvide durante los próximos 15 años. QuerÃa sentarme en un rincón y llorar. Si fuera después de un juego 5-0, podrÃa hablar muy cómodamente. Pero incluso si perdiéramos 13-0, tengo que ser un hombre y decir lo que pienso. Es realmente escandaloso", declaró el arquero agobiado por su actuación.
Además, hizo referencia a la sensación del equipo dentro de la cancha durante el duelo: "Tengo miedo de mirarme en el espejo. Hice todo lo que pude, pero los jugadores del Ajax continuaban viniendo hacia mÃ, no habÃa forma de detenerlos. Para ellos fue como un entrenamiento".
Van Crooij agregó que no pudo dormir tras el partido, pero en este caso no fue por los goles, sino que por su hijo de siete semanas. "Cada vez que cierro los ojos, me pide que lo cuide y se reÃa. Es hermoso que los niños se rÃan. Para mis dos hijos, no soy un arquero con 13 goles. Claro, soy su padre", expresó.
Por último, el guardameta se refirió a las palabras de André Onana, arquero rival, una vez finalizado el encuentro: "No me acuerdo que me dijo, estaba en muy mal estado y mi único pensamiento era dejar el campo lo antes posible. Pensé que deberÃamos conseguir la revancha de este partido lo antes posible. No podemos quedarnos estancados".