El campeón asiático, dos años después, coincidirá de nuevo en este torneo con el conjunto español, campeón de Europa. Entonces, el Kashima ejerció de anfitrión en la edición del 2016 y discutió al Real Madrid el título en la final que, tras la prórroga, conquistó el equipo entonces dirigido por Zinedine Zidane.
En esta ocasión el Kashima está presente en el torneo por méritos propios. Como el mejor conjunto de Asia. Buscará la revancha, en semifinales, contra el cuadro de Santiago Hernán Solari, el próximo miércoles. Será el debut del vigente campeón europeo.
Otra vez el conjunto asiático se verá las caras con Real Madrid, mientras la otra llave se definirá más tarde con el duelo entre Esperance y el local Al Ain.