Los manifestantes, que había cortado más temprano el tránsito en el Obelisco, se enfrentaron con los agentes que les impidieron continuar con su movilización.
Los uniformados comenzaron a arrojar gas pimienta, mientras los operarios despedidos intentaban pasar a la fuerza por el cordón que habían formado los policías, lo que generó conflictos entre las dos partes."No nos dejan pasar, nosotros queríamos llegar al Congreso, a hacer ver nuestro reclamo y no nos dejaron pasar, nos están reprimiendo. Nos van a golpear a nosotros también", advirtió Myriam Bregman, referente del PTS, uno de los partidos de izquierda que acompaña el reclamo.