En la esquina de Alberdi y Goldaracena, en unos de los muros del viejo Molino, un grupo de personas homenajeó a Diego Armando Maradona pintando un mural. La iniciativa nació de manera espontánea de un grupo de amigos que se juntan todas las semanas a jugar al fútbol. Comenzaron por la tarde y terminaron antes de las diez de las noche.
El resultado final, realizado por iniciativa de Diego Abu Arab, fue un dibujo del Diez con alas de ángeles y un cartel al lado con la leyenda "Barrilete cósmico".