La secuencia tiene como única finalidad humillar a la mujer, que con toda su amabilidad se presta a la requisitoria de un varón que se presenta como amable y simpático. Detrás de ese acercamiento -a priori amistoso-, se esconde el objetivo de mofarse de ella y de exponerla cruelmente ante otros. Otra vez, lo que se ve es una conducta a las claras misógina y de menosprecio hacia la mujer.
Este episodio se produce solo horas después de que Fernando Penovi, otro argentino que había viajado a Rusia para ver a la Selección en el Mundial, fuese expulsado de ese país por su agresión sexista a una joven local.
El hombre, oriundo de Wilde, debió regresar a la Argentina luego de que se viralizara un video suyo en el que le hizo decir a una adolescente rusa: "Hola, argentinos. Vengan para aquí. Quiero chupar pija".