Pero para cuando el hombre llegó a la esquina de Arrieta y San Martín con la ambulancia, el bebé de 38 semanas ya había nacido. La mamá estaba asustada y rodeada de perros que les ladraban.
De acuerdo con lo que informa Río Negro, el bebé se sobrepuso a las circunstancias en las que fue dado a luz y, tras David, está bien. Fue derivado a Choele Choel.