Respecto de la jornada la presidenta de Red Alerta mencionó la "fina línea que existe entre la trata y la prostitución, entendiendo que la prostitución no es trabajo". Se busca, dijo "brindar herramientas sobre cómo hacer una denuncia, que políticas públicas se necesitan para dar respuestas a quiénes son sobrevivientes y padecen la problemática: las víctimas tienen un antes, un hoy y un después. Hoy, nos preocupa el después, en lo que significa poder garantizar derechos humanos sociales fundamentales, como es la vivienda, la educación, un trabajo digno para que no se sigan vulnerando sus derechos".
"La prostitución no es trabajo, es una forma más de violencia de género"
"La prostitución no es trabajo", puso relevancia y acotó que se trata de "una forma más de violencia de género y una de las peores; se ataca contra la dignidad de las mujeres, contra su propia psiquis, es violencia económica, violencia sexual y no solamente de las mujeres, sino también de las niñas, de las travestis y las trans". Asimismo aseveró: "Cuando apuntamos al cambio cultural, también apuntamos a la concientización para que los hombres dejen de consumir prostitución y comprar sexo en rutas, en prostíbulos, que no son whiskerías o cabaret, donde las mujeres son sodomizadas, esclavizadas sexualmente, violadas, y ultrajadas en lo más íntimo de su naturaleza". Elonce.com.