El jefe de la guardia del Hospital de Niños San Roque, Hugo Vainstein, confirmó que comenzaron a atender a niños con cuadros de bronquitis. Al respecto, el médico pediatra hizo hincapié en el trabajo que vienen desarrollando desde 2010 en la sala de posta respiratoria, un espacio en el que derivan a los pacientes de cero a cinco años con cuadros de bronquitis de tipo obstructiva, a quienes someten a un tratamiento con el propósito de evitar la internación.
?En el hospital tenemos pocas camas y un gran volumen de consultas y derivaciones de toda la provincia, lo que hace casi imposible atender a todos?, admitió. ?Por eso, la sala nos permite evitar internaciones y reforzar el seguimiento del caso. De no responder al tratamiento se resuelve la internación?.
De acuerdo a lo explicado por Vainstein, para evitar la internación, se lleva adelante una contrarreferencia con los centros de salud, desde donde desarrollan un monitoreo sobre la evolución de la patología respiratoria; al tiempo que detectan a la población de mayor riesgo para que reciban un tratamiento adecuado.
?Todos los chicos que primero son evaluados en la guardia y a los que se les diagnostica alguna patología de tipo respiratoria, son derivados a la sala de posta respiratoria para su seguimiento ambulatorio?, ratificó.
En tanto, el jefe de la guardia del Hospital de Niños indicó que las consultas de pacientes a los que les efectúan un seguimiento epidemiológico están por debajo de lo habitual.
?Estamos teniendo unas 1.500 consultas por semana, cuando lo habitual es que se presenten entre 1.800 y 2.000, pero suponemos que en los próximos días el número de pacientes se va incrementar?, adelantó a El Diario.
En casa
En estos días fríos hay que tener presente ciertos recaudos para evitar riesgos con los mecanismos de calefacción en los hogares.
El monóxido de carbono es un gas sin olor o color, producido por la mala combustión del gas natural, la leña, el carbón y el querosén y que en altas concentraciones puede generar graves consecuencias.
Con el fin de evitar intoxicaciones, desde el cuerpo de Bomberos Zapadores de Entre Ríos recordaron las recomendaciones para prevenir incendios en época invernal. En tal sentido, enfatizaron la importancia de no usar alargadores en caso de emplear calefactores eléctricos y no sobrecargar los tomacorrientes.
En las instalaciones de gas es necesario verificar que la llama tenga un tono azul limpio y no amarillo y la instalación debe estar inspeccionada por un gasista matriculado.
Además, se deben mantener encendedores y fósforos fuera del alcance de los niños y al vaciar los ceniceros comprobar que su contenido este perfectamente apagado.
Es aconsejable ventilar siempre los ambientes cuando se están calefaccionando, al tiempo que se aconseja tener en el hogar un extintor tipo ABC ubicado en un lugar estratégico.
Las conexiones eléctrica son unas de las causas más frecuentes de producir incendios en el hogar, verificar de forma permanente que los tomacorrientes y conectores eléctricos, estén en buen estado, ya que estos al sobrecalentarse o fundirse, pueden ser causantes de incendios. Los tomacorrientes de la pared no deben tener ningún tipo de anomalías.
El extenso listado de sugerencias también indica: evitar dejar conectados los cargadores de teléfono, consolas, y demás artefactos, no fumar en la cama; colocar los productos inflamables como los aerosoles, alcohol, ceras, fuera del alcance de los niños, y ubicarlos en ambientes frescos no expuestos a ninguna fuente de calor, mantener el querosén u otro líquido combustible almacenado en el recipiente metálico aprobado, en lugares de almacenamiento bien ventilados y fuera de la casa, y nunca utilizar artefactos que queman combustible en una habitación sin ventilación adecuada.
Señales de alerta
Acerca de los síntomas para tener en cuenta en bebés y niños, el pediatra subrayó la importancia de estar atentos a la agitación, fiebre, la dificultad para alimentarse que puedan presentar. Al mismo tiempo, subrayó la importancia de la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida del niño y que se continúe con la práctica al menos hasta el año. Otro aspecto importante es que tengan todo el esquema de vacunas completo; y que los niños de entre seis y 24 meses tengan la vacuna antigripal colocada, así como también todos aquellos chicos con enfermedades crónicas o quienes tienen dificultades respiratorias habituales también tengan la vacunación antigripal.Además, evitar los cambios bruscos de temperatura es lo que hace que los chicos tengan menores probabilidades de tener procesos infecciosos y respiratorios.
