En tanto, las "víctimas" son llamadas a declarar una por una ante la Fiscalía. Al respecto, la jefa departamental de Policía, Miriam Cabello del Campo, confirmó que el hecho “está caratulado como estafa”. Hasta el momento no había una denuncia formal de los poseedores de las tarjetas secuestradas, no obstante, se espera que las presuntas víctimas realicen la denuncia correspondiente.
Acerca de la investigación previa comentó que “se venía trabajando desde la semana pasada. Le retenían las tarjetas como garantía de pago de la mercadería que sacaban. Lo que se investiga es si se le retenía la tarjeta y además eran estafadas con movimientos no permitidos por los poseedores. En la investigación se realizaron dos allanamientos”.
Lo que se espera ahora es que las víctimas realicen la denuncia porque es la punta de toda la investigación que va a llevar a identificarlas. Es un trámite que va a llevar bastante tiempo, apuntó Cabello del Campo en declaraciones que reproduce La Semana.
Además, destacó que ya hubo dos o tres personas que se han presentado, a quienes se les comenzó a entrevistar para saber fehacientemente si son víctimas de un delito.
