La Policía, que iba detrás, hizo sonar la sirena para que se detenga, ya que llevaba la capucha puesta y el casco en el brazo. Detuvo su marcha, enojado. Cuando los efectivos le pidieron la documentación de la moto aseguró que no la tenía. Como le retuvieron el rodado, comenzó a insultar a los policías y arrojó un ladrillo contra el móvil policial.
Quedó detenido. Fue trasladado a Alcaidía de Tribunales por el delito de Resistencia a la Autoridad y Daños en Bienes del Estado.