Policiales En una reserva de Gualeguaychú

Cazadores furtivos fueron sorprendidos con ejemplares de ciervos Axis

Tres cazadores furtivos fueron sorprendidos en la Reserva El Potrero de Gualeguaychú, luego de un llamado de guardafaunas. La policía secuestró y decomisó seis ejemplares de ciervos Axis.
En la madrugada del sábado, funcionarios de la Brigada de Prevención de Delitos Rurales de Gualeguaychú, luego de un llamado de guardafaunas de la Reserva, detuvieron el accionar de tres cazadores furtivos que portaban un fusil 308, con mira telescópica.

Los cazadores furtivos habían dado muerte a seis ejemplares de la especie exótica de ciervos Axis.

Los policías de Abigeato concurrieron al llamado de los guardafaunas de la reserva en la madrugada del sábado. En el terreno, constataron la introducción de personas en forma ilegal en el interior del monte. Se trataba de tres sujetos, oriundos de la ciudad, quienes portaban un fusil 308 de grueso calibre, con mira telescópica. Junto a los mismos encontraron a seis ciervos Axis, especie exótica que llegó desde India y se reprodujo en la zona hasta copar buena parte de los montes por no contar con un depredador natural.

Los ciudadanos fueron sorprendidos por los efectivos en el interior del monte, tras ingresar en forma ilegal, además de no contar con la licencia correspondiente para la actividad. La caza y muerte de los Axis se efectuó en horario nocturno, con luz artificial, en lo que es una práctica habitual de los furtivos.

Una vez en el lugar, los efectivos encontraron los cuerpos eviscerados, seguramente a la espera de un vehículo para que transporte a los cazadores y sus trofeos a la ciudad.

Las tres personas fueron notificadas del acta de infracción que se les impuso por la transgresión a lo estipulado en la Ley Provincial de Caza 4841. En el procedimiento se secuestró el fusil 308, cartuchería, cuchillos y elementos de iluminación. Las piezas de caza fueron decomisadas.

Desde la Brigada de Gualeguaychú se recordó que el personal policial trabaja y colabora con guardafaunas y personal de fiscalización en el control de la actividad de caza mayor y menor, actividades que deben realizarse con los correspondientes permisos y la autorización de los propietarios de los establecimientos rurales en donde se desarrolla la actividad. (El Día)
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