Fuentes policiales confirmaron que el accidente se registró cuando el joven se encontraba fumando y cocinando a la vez. En un determinado momento, sintió olor a gas, por lo que al abrir la puerta del horno de la cocina para chequear si el olor provenía de ahí, se originó una llamarada que le terminó ocasionado graves quemaduras.
Según se indicó, el horno se había apagado y quedó emanando gas.
Ante la intervención de efectivos policiales y personal de Bomberos Zapadores, éstos procedieron a cerrar todas las llaves de paso y constataron que en el interior de la vivienda no se registraron quemaduras ya que solo fue una llamarada la que afectó al joven.
También se dio intervención a la Dirección Criminalística.