provincia y por la noche analizó la situación por medio de un
mensaje televisivo.
"Las inundaciones comenzaron en las Sierras Chicas, donde
llovieron 300 milímetros en pocas horas en una zona donde llueven
700 milímetros al año. Se llegó a tener mil evacuados, nueve
muertos (en rigor, son ocho muertos y un desaparecido), 250 casas
totalmente destruidas. Con daños en hospitales, puentes, escuelas,
rutas, acueductos, redes de distribución domiciliaria", indicó.
Además, prosiguió: "En la zona este llovieron 400 milímetros en
sólo 12 horas, siendo una región donde llueven 850 milímetros en
un año. Se inundaron Balnearia, La Tordilla, localidades pequeñas
como Tránsito, Pedro Vivas y Arroyito".
De la Sota sostuvo que "en el sudeste se inundó Idiazábal, que
está totalmente bajo el agua" y añadió que "lo grave es que no
para, ni parará de llover".
"Para el martes y miércoles se anuncian más de 100 milímetros
de lluvia. Anoche (por la noche del domingo) volvieron a caer 75
milímetros en el Este y 140 milímetros en la cuenca del río
Ctalamochita", resaltó.
"Estamos viviendo juntos la mayor catástrofe climática de
Córdoba de los últimos 50 años. Y juntos, con la ayuda de Dios,
tenemos que encontrar la fuerza y los medios para superar esta
tragedia. Y en eso estamos", precisó.
El gobernador cordobés aseguró que "los pronósticos del
Servicio Meteorológico dicen que las lluvias continuarán por
algunos días más y que pueden ser muy copiosas", por lo que pidió
a las poblaciones ribereñas que sean precavidas y que respeten las
indicaciones de las fuerzas vivas y de seguridad.
"No vamos a permitir que el esfuerzo de toda una vida sea
destruido para siempre en cuestión de minutos. Que Dios nos
proteja y nos bendiga a todos", concluyó De la Sota.
NA
