“Tomando en cuenta todas las pruebas disponibles, la OMS recomienda el uso de la vacuna en personas de 65 años y más”, declaró el Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico sobre Inmunización (SAGE).
Contra las cepas
El presidente de SAGE, el mexicano Alejandro Cravioto, reconoció que en los ensayos clínicos de esta vacuna hubo una pequeña participación de mayores de 65 años, lo que ha podido contribuir a las dudas sobre su eficacia, pero los análisis de SAGE concluyen que “los resultados en esas personas no son diferentes que en grupos más jóvenes”. La decisión de la OMS ocurre después de que algunos países decidieran recomendar su uso para personas de menos de 65 años, o incluso de 55, como en España, Italia y Bélgica, ante la falta de datos sobre su eficacia en la población de edad más avanzada.Según los expertos de la OMS, la vacuna también puede utilizarse en lugares donde “estén presentes las variantes”, pese a que estudios recientes sugirieran que ese inmunizante es menos efectivo contra la cepa detectada inicialmente en Sudáfrica.
Respuesta a la pandemia
“Creemos que nuestra vacuna protegerá pese a todo contra las formas graves de la enfermedad”, afirmó de su lado un vocero de AstraZeneca.“Es demasiado pronto para rechazar esta vacuna” que es “una parte importante de la respuesta mundial a la pandemia actual”, valoró Richard Hatchett, uno de los responsables del mecanismo Covax para garantizar una distribución justa de los medios de lucha contra el covid-19. La vacuna de Oxford y AstraZeneca está siendo producida en la Argentina para su distribución en América latina con excepción de Brasil, junto a un laboratorio mexicano que completa el desarrollo del producto. Se trata de la empresa mAbxience, del Grupo Insud, que elabora el reactivo de la vacuna en su planta del conurbano bonaerense.