Esta semana el gremio de los colectiveros arrancó un paro de actividades entre las 22 y las 6 en casi todo el país por la falta de pago de la última actualización salarial que debía regir para enero y febrero de este año. Quedaron a salvo de la medida de fuerza la Capital Federal y el conurbano bonaerense, adonde los pagos del Ministerio de Transporte se volcaron de manera casi lineal a los aumentos de salarios.
La disparidad guarda relación con la decisión del Ejecutivo nacional de reducir de manera paulatina los subsidios y transferir a las provincias la determinación sobre los salarios de los choferes, según publica Ámbito Financiero.