Sin lugar a dudas, su paso por las diferentes categorías dejó una huella imborrable. Desde sus inicios arriba de un karting, el pasaje a las carreras provinciales y su incursión en los circuitos nacionales, tanto en el Top Race Junior como en el TC Pista Mouras, el TC Mouras, el TC Pista y el salto al Turismo Nacional, dónde actualmente milita en la "Clase 3", en la cual atravesaba un momento esplendido antes de la suspensión de las actividades.
En dialogo con El Diario, el crespense dio cuentas del panorama que recorre debido a las consecuencias de la pandemia y brindó su óptica con respecto al futuro en las pistas.
"Esta situación me afectó mucho porque venía con un buen envión anímico, ya que había logrado resultados positivos, teniendo un buen potencial y se paró todo indefinidamente. Me agarró en un gran momento que no me servía parar", señaló el hombre de 28 años, en relación al cese del certamen que reúne a los pilotos que protagonizan la categoría enmarcada en el Turismo Nacional.
El entrerriano había comenzado la temporada con el pie derecho. En su estreno, en la cita llevada a cabo en Bahía Blanca, alcanzó posicionarse entre los diez primeros, mientras que, en la continuidad y en la última contienda antes del párate, desarrollada en La Pedrera ? en la provincia de San Luis -, se subió al podio tras culminar en la segunda ubicación. En este contexto, Joel, deslizó: "El inicio del calendario me trató bastante bien, tuve dos carreras muy positivas. Antes de este freno, me encontraba en la cuarta posición en el campeonato, muy expectante y con muchas ganas previamente a que se desate el problema".
Para el piloto nacido en la "Capital Nacional de la Avicultura", es un desafío trascendental regresar en el mismo tono para un campeonato que hace notar su progreso. "El nivel del Turismo Nacional hace años viene dando pasos agigantados hacia el avance en lo deportivo y en lo conductivo. Creció muchísimo y, creo que, entre las cinco categorías nacionales más importantes, es una de las que más ha crecido", contó y agregó: "Las primeras carreras de esta temporada no fueron la excepción. En Bahía Blanca hubo un record de público y, en La Pedrera, no tuvimos la presencia de la gente pero lo siguieron desde su casa. Tomamos una gran repercusión en este último tiempo y es positivo".
Sin embargo, no es el único dilema que atormenta al crespense. La situación económica es incierta y hasta se puede tornar oscura. En este sentido, expresó: "Sinceramente, no tengo un número concreto para saber cómo me afectó. Desde que se decretó como seguiríamos por el coronavirus, no hablé con las personas que me apoyan publicitariamente sobre su continuidad. Realmente, hoy, no sé dónde estoy parado". Además, añadió: "Cuando la categoría comunique una fecha posible para el retorno a las actividades, empezaré a charlar y ver lo que necesito y tengo para volver a la competencia".
Las expectativas están a flor de piel y el recelo por el porvenir, se introdujo en muchos talleres. "Ostento grandes expectativas en lo deportivo por el funcionamiento que traíamos con el auto, el buen equipo que formamos y por la posición que ocupo en la tabla de posiciones. No obstante, no voy a negar que le tenga miedo e incertidumbre al momento de volver a hablar para reunir un presupuesto, porque quizás esté complicado". Por otro lado, hizo alusión a los objetivos que se plantean con la escuadra: "En tal caso que, podamos reemprender la competencia en la categoría, soñamos con luchar por cosas importantes. Demostramos firmeza en el arranque del certamen y quiero pelear el campeonato, porque conformamos un gran equipo en el taller y eso te otorga mayor confianza".
