El Pachuca se consagró campeón por quinta vez en su historia de la Liga de Campeones de Concacaf, mejor conocida como Concachampions, al ganarle como local la Revancha de la Final a los Tigres por 1 a 0, cerrando y un 2 a 1 en el global, con un gol del argentino Franco Jara.
El delantero sudamericano anotó a los 37 de la segunda mitad después de que el arquero argentino de Tigres Nahuel Guzmán dejara un rebote a un disparo de larga distancia del mexicano Hirving Lozano.
Pachuca además es el primer clasificado al Mundial de Clubes, que se realizará en diciembre próximo en los Emiratos Árabes, como representante de la Concacaf (Confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe de Fútbol).
El partido había sido muy parejo hasta la expulsión en el equipo visitante a los 33´ del complemento del mediocampista argentino Guido Pizarro, que fue titular a pesar de la fractura de nariz que sufrió en la ida y jugó con una máscara protectora.
A pesar de ello, el final transcurrió con cierto dramatismo, debido a que Gignac anotó en el minuto 93, pero se encontraba en fuera de juego, posición que el árbitro se encargó de marcar correctamente.
El Pachuca ya había tenido un par de ocasiones para ponerse en ventaja. A pesar de que el empate sin goles le daba el título, el equipo dirigido por el uruguayo Diego Alonso salió con intenciones de convertir, a diferencia del planteo de Tigres.
Fue el mismo Jara quien protagonizó las oportunidades más claras, ambas en el final del primer tiempo, que Guzmán detuvo con efectividad. La primera fue un cabezazo después de un centro preciso de Lozano. La segunda ocurrió en la jugada posterior, tras un rebote que el delantero argentino encontró a la salida de un tiro de esquina.
En el primer tiempo, el delantero francés André-Pierre Gignac tuvo sus propias ocasiones para poner en ventaja a los Tigres: una fue atajada por el arquero Alfonso Blanco y la otra se encontró con el travesaño.
