"El banquillo del Barça quedará vacante cuando Luis Enrique decida, no cuando alguien diga que se puede ir", respondió el técnico sevillista, aunque dejó abierta la posibilidad a futuro: "El día de mañana nunca se sabe".
"Estoy muy bien en Sevilla y mi mente pasa por seguir trabajando todos los días para consolidar una idea acá, en el club que me trajo a Europa. Dentro de una semana, a lo mejor la pregunta tiene más fuerza o pierde totalmente la fuerza. En esta profesión no me genera expectativa el comentario y sí mi actualidad y mi realidad", explicó.
La dura derrota del Barcelona en el partido de ida de los octavos de final de la Champions League frente al PSG (4-0) disparó los rumores sobre la posible salida de Luis Enrique al final de la temporada y el apellido de Sampaoli picó en punto como posible reemplazo.