La goleada es anecdótica y no modifica nada entre los de arriba y los de abajo. Suma nomás para las estadísticas y los récords. Porque lo que queda de este partido, el último de la temporada de la Liga, es la incertidumbre de lo que pasará con el entrenador italiano, que este año terminó con una sequía después de conseguir la Champions y el Mundial de Clubes.
Lo rumores lo ponen más afuera que adentro a Ancelotti. Pero es extraño su caso, como el de Iker Casillas, que aún no saben dónde seguirá su futuro. Y extraño por la encuesta que realizó el Real a sus socios, a quienes le consultan sobre la valoración de ellos en el último año (también les consultan sobre quién debería reemplazar al actual DT).
El Real goleó pero sin sonrisas y con muchas dudas con mira al futuro.