A partir de datos aportados por distintas personas, se pudo establecer con quiénes estuvo I.N. en la noche del viernes y la madrugada del sábado. Además, se supo que había existido un conflicto o amenazas de parte de jóvenes. En este sentido, se apuntaron tres domicilios para encontrar elementos relacionados al hecho. La Justicia autorizó los allanamientos que se llevaron adelante en la cortada 135 (un pasaje peatonal que une la 620 con Gianelli), y en calle Los Minuanes. En una de las viviendas se secuestró un revólver.
Durante la jornada de hoy se prevé que declararán más testigos en la Fiscalía, y se espera que surjan más indicios para consolidar las sospechas.
Otro hecho permitió confirmar la orientación de la investigación. En la noche del sábado intentaron quemar una casa en la zona donde viven los sospechosos. El fuego quemó algunas pertenencias pero no se propagó. Se cree que se trataría de una venganza por el ataque sufrido por el menor el sábado a la tarde.
I.N. sigue internado en estado crítico en Terapia Intensiva del hospital San Martín. Tuvo una leve mejoría, pero su situación sigue siendo grave, debido a la herida de arma de fuego que le perforó intestinos y le afectó la vena cava.
Se indicó que un hermano de la víctima hace un tiempo apuñaló a un joven, hecho que algunos relacionan con el enfrentamiento entre los dos grupos.