Policiales Acusado de abusos contra menores

Escobar Gaviria sumó otra denuncia: Los testimonios del primer día de juicio

Ya hay cuatro denuncias por abuso que lo llevaron a la cárcel. La quinta acusación se conoció en la primera audiencia del juicio oral y público que se lleva a cabo en los Tribunales de Gualeguay.
Una nueva denuncia por corrupción agravada contra un joven de 17 años se incorporó ayer a la causa contra el cura Juan Diego Escobar Gaviria, en el marco de la primera jornada de debate oral.

El testimonio del menor fue tomado el viernes por la Fiscalía que conduce Federico Uriburu y aceptado este martes por parte del tribunal. El muchacho y su madre declararían en las próximas horas

"Yo soy Juan Diego Escobar Gaviria, el imputado", dijo el sacerdote a la jueza Angélica Pivas, acercando su boca al micrófono, lo que permitió amplificar su tono colombiano en toda la sala de audiencias.
La quinta denuncia contra el cura fue informada a Fiscalía entre viernes y sábado. Se trata de uno de los jóvenes que fue monaguillo de Escobar Gaviria. El chico ya había declarado en Cámara Gesell cuando inició la causa, pero en aquel entonces, por miedo o por vergüenza, o tal vez por ambas cosas, no se animó a contar la verdad.

Cerca del fin de semana, movilizado por el inicio del juicio oral, el joven se contactó con una de las víctimas denunciantes y le manifestó su apoyo porque él también había sido víctima del religioso "sanador". Fue así que se le ofreció volver a declarar y el joven accedió. Contó que comenzó a ser abusado por Escobar Gaviria cuando tenía 14 años, a poco de sumarse como monaguillo de la parroquia de Lucas González, y que eso se repitió hasta mayo de 2016 aproximadamente.
Dijo que los abusos fueron en la casa parroquial y cuando viajaban a misas en Paraná, en el auto particular del cura. Precisó que si tuviera que indicar la cantidad de veces que sufrió distintos tipos de abuso, se quedaría "corto si dijera que fueron unas 50 veces".

"A mí me dolía por dentro, porque fui abusado desde los 14 hasta los 16 años, pero más me dolía lo que iba a sufrir mi vieja", expresó el joven que hoy tiene 17 años, en relación a por qué no contó todo lo que había vivido cuando se le realizó la Cámara Gesell. "Por vergüenza y también por miedo de que se burlen, de salir a la calle y que me empiecen a gritar, como le estaba pasando a Silvia Muñoz", graficó cuando se le repreguntó sobre el punto.

Pasado el mediodía hubo un cuarto intermedio y las exposiciones de testigos se reanudaron cerca de las 15:30, cuando se pudo escuchar al marido de Silvia Muñoz y padre de la primera víctima que denunció; a una amiga de la familia y madre del mejor amigo del niño que se animó a hablar; el ex intendente de Lucas González y técnico informático, Renato Bella, y su esposa; una docente del Colegio Castro Barros San José y la monja Marta Carrizo.
Las declaraciones
Silvia Muñoz fue la primera testigo que entró al debate, luego de la lectura del requerimiento de elevación a juicio. La mujer contó en detalle cómo fue que su niño de 11 años llegó a decirle que estaba siendo víctima de abusos por parte del cura. Recordó que la noche del 24 de octubre del año pasado, cuando estaban cenando en familia, su pequeño la apartó del resto de los integrantes para transmitirle la intimidad más cruel.

Muñoz agregó además que al día siguiente corrió al Colegio Castro Barro San José, donde puso al tanto de la situación a una docente del niño y otras autoridades de la institución. Los detalles describieron acabadamente el escenario por esos días de octubre, que marcaron un antes y un después en Lucas González.

La docente que escuchó de boca de Muñoz sumó su declaración este martes y ratificó lo dicho por la mamá. Sobre esa instancia también testimonió la vicedirectora del colegio, quien refirió al carácter hostil del cura y dio cuenta de que el rendimiento escolar del niño había caído en los últimos meses.

También expuso su testimonio ante los jueces Luciana Gasztelumendi, contadora y tesorera del grupo de la Parroquia San Lucas Evangelista. La mujer trató de desvincularse de la comisión religiosa y se encargó de decir que como es contadora pública, la mayoría del tiempo lo pasó en su estudio contable, sin saber qué pasaba con los niños al interior de la casa parroquial, lugar al que señaló como un espacio "abierto".

Otro de los deponentes fue el papá del nene que realizó la primera denuncia y marido de Silvia Muñoz. Su relató alcanzó uno de los puntos más emotivos de la audiencia cuando lamentó haberle confiado la guarda de su hijo al cura. El hombre protagonizó un accidente en 2011 en el que murió un bebé de 18 meses y admitió que Escobar Gaviria lo ayudó hasta económicamente. Recordó cómo el párroco le insistía para que llevara a su hijo de monaguillo y lo sacara del ambiente hostil que el accidente había generado en la familia. El hombre reconoció que cuando el pequeño se animó a contar el trauma que vivía, dudó por la profunda confianza que le tenía al religioso.

Alejandra Giacomin es amiga de Silvia Muñoz y madre del mejor amigo de R, el pequeño niño que lo denunció a Escobar Gaviria por primera vez. La mujer contó este martes que supo todo desde el primer momento. Sucede que R, el hijo de Silvia Muñoz, le contó a su mejor amigo que era abusado por el cura. Ambos pequeños se lo transmitieron a Giacomin, quien lo impulsó a R para que pusiera al tanto a su madre de lo que estaba sufriendo.

La audiencia continuó con los relatos del ex intendente Renato Bella y su esposa, quienes son dueños de un local de reparación de computadoras. Ambos contaron que al poco tiempo de haber llegado a Lucas González, Escobar Gaviria llevó su PC personal a reparar. Fue allí que advirtieron las habituales visitas a sitios pornográficos, lo cual estaba provocando los problemas. Por aquellos días de 2005, ese dato trascendió en el pequeño pueblo y por eso, la esposa de Bella recibió una fuerte reprimenda telefónica por parte del cura.

La madre de una segunda víctima también aportó su testimonio frente al Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguay. La mujer contó que hace un tiempo atrás, su hijo atravesaba problemas de adicciones y en una oportunidad terminó internado en el hospital, luego de ingerir fuertes drogas. En ese momento, por recomendación de la abuela del menor, una mujer muy religiosa, hubo un acercamiento al cura Escobar Gaviria. Fue en la habitación de la casa parroquial donde el menor se convirtió en víctima de tocamientos por parte del religioso. Mientras tanto, su abuela estaba en la nave mayor de la Iglesia. El chico decidió no volver con el cura y le dejó muy en claro a su madre el por qué.

Los que se suman este miércoles

Para este miércoles se sumarán los testimonios de Alexis Endrizzi, víctima; Nancy Ruiz Díaz, mamá de Alexis; Marcos Cabrera, padrastro de Alexis; Teresa Leonor Rosemberger, suegra de Alexis; Jacqueline Rearte, novia de Alexis; y la nueva víctima denunciante y su madre.
Fuente: Análisis Digital
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