Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrios de Pie, explicó que “el INDEC acaba de admitir que Argentina tiene 18.500.000 de pobres y casi 5 millones de indigentes, lo cual evidencia el ajuste que el gobierno nacional niega. En este duro contexto, las organizaciones sociales mantenemos comedores y merenderos a lo largo y ancho del país. Allí, detectamos también los problemas de malnutrición en niños, niñas y adolescentes. Asistimos con donaciones de comercios de cercanía y con los alimentos provistos por el Ministerio. Sin embargo, las entregan que llegan son cada vez más pobres, menos variadas e insuficientes, y contrarias a las mismas recomendaciones sobre nutrición que expide el Ministerio”.
Saravia, quien coordina una de las organizaciones sociales más extendidas del país, sostuvo que “mientras en el mundo se escuchan los ecos de otro escándalo por los paraísos fiscales, donde lamentablemente no falta la clase política argentina, desde Barrios de Pie pedimos que el Potenciar Trabajo se asemeje a la canasta básica. Miles de personas realizan tareas que, por esos montos, difícilmente serían llevadas adelante por nuestros gobernantes”.