Castellanos convirtió a los 12 minutos del primer tiempo, a los 24' del mismo período, al minuto del segundo tiempo y el último a los 17'.
En tanto, el delantero brasileño Vinicius Junior descontó para la visita cuando iban 34m. del PT, y luego el mediocampista español Lucas Vázquez (40m. ST).
Castellanos, quien estuvo en el radar de River Plate durante la temporada pasada pero decidió emigrar a España desde el fútbol de los Estados Unidos, aprovechó las falencias de la última línea madridista, con varios nombres alternativos, como el arquero ucraniano Andriy Lunin, en lugar del belga Thibaut Courtois.
Posteriormente, Castellanos le ganó en el cuerpo a cuerpo al defensor brasileño Eder Militao y con la cabeza se llevó la pelota para ponerse cara a cara con Andriy Lunin, al que venció con un remate fino entre sus piernas. En ese momento, Girona se veía 2 a 0 arriba en lo que al final sería su tercera victoria en la historia sobre el conjunto madridista.
En el medio, Vinicius parecía torcer la narrativa, ya que se impuso entre los defensores locales y emulando al argentino definió con un toque sutil entre las piernas del arquero santafesino Paulo Gazzaniga. Luego, el brasileño sólo se peleó con los rivales y su fuego sagrado se apagó lentamente, con la cabeza puesta más en la Liga de Campeones que en LaLiga como sucedió toda la temporada.
Con el correr de los minutos y el resultado establecido, el entrenador de Girona, el español Miguel Ángel Sánchez, decidió sacarlo al argentino cuando iban 27 minutos del complemento. En ese instante, Castellanos selló su pasaje a la posteridad, ya que alcanzó el récord Diego Milito (Zaragoza), siendo los únicos argentinos que celebraron en cuatro ocasiones en un mismo partido contra Real Madrid. En el caso del exfutbolista fue en la Copa del Rey 2005-2006.
