Al finalizar la etapa a Moquegua, en plena jornada "maratón", Sara no pudo más. Allí debió abandonar, en el camino desde Arequipa. Y allí apareció Xavier, que siempre estuvo junto a ella en la ruta, aminorando su ritmo para transitar esta experiencia juntos.
Ambos compiten entre las motos "Originals", sin asistencia propia, dentro de lo que se ll ama habitualmente "Malle Moto".
Sara primero sufrió una caída que le dejó una muñeca averida. Luego se volvió a caer y allí, con un notable esfuerzo, puso de pie a su moto, para que finalmente más adelante un problema mecánico le impidiera continuar.Sound ON ?
— DAKAR RALLY (@dakar) January 11, 2019
The struggle of @sarita98garcia to lift up her bike
?Enjoy the most intense moment of Stage 4 thanks to @RebellionTime
El esfuerzo de Sara García para levantar su moto
? Disfruta del momento más intenso de la Etapa 4 gracias a Rebellion Timepieces#Dakar2019 pic.twitter.com/HuDfu7VLdO
La organización coloca cámaras pequeñas para registrar el tránsito en carrera en primera persona. Y allí se observó cómo se esforzó Sara por seguir en competencia, escuchándose los gritos por poner en pie su máquina.
Ella luego lo explicó: "Tras 3 horazas con Javi Vega dándole mil vueltas a la moto, no dimos con el fall. Me quedé en el fesh fesh de la foto &... cuando fui a arrancar, mi gorda se ponía de huelga. Primero no tenía batería, pusimos la de Javi que estaba cargada; luego no funcionaban las bombas, cambiamos el interruptor, seguían sin funcionar hasta que haciendo un invento con un fusible, conseguimos alimentarlas, pero tampoco arrancaba; revisamos las líneas de corriente, todo OK... Así que ahora toca empujar dedde el campamento a quien me ha llevado en volandas cada etapa".