Sin embargo, Fabrice Olszewski tuvo la posibilidad de conocer más a fondo al hombre que hay detrás del entrenador. El hombre que fue el traductor del Loco desde que este llegó a Olympique Marsella sacó a la luz algunos momentos que le tocó vivir con él.
Una de las anécdotas que más repercusiones tuvo, fue la del día que Bielsa lo invitó a pelear. No le gustó cómo había tratado a los jugadores, se lo hizo saber y el DT reaccionó. "Pensé que quería hablar pero se acercó y me dijo 'esto se va a resolver a golpes de puño, es la única manera de resolverlo'. Yo estallé de risa y me fui. Después me ofreció disculpas, yo también y el tema se resolvió muy fácil".
En la entrevista que le dio al Canal+, Olszewski describió al rosarino como "una persona agradable que a veces se deja llevar por su personaje" y contó: "En una ocasión le dije que él era comparable con Vincent Van Gogh, un genio pero que a nivel de las relaciones humanas es más complicado, y él lo consideró un halago".
Finalmente, señaló que su despedida del club se veía venir. "Un día, enojado, dijo que no tendría que haber firmado con este club", afirmó y dio a conocer uno de los principales motivos de su partida. "Había jugadores que él quería mantener de forma primordial y que se marcharon".