Landrove, que tenía 23 años y residía en La Habana, aunque era originaria de Holguín, murió en el hospital Calixto García de la capital, donde se encontraba ingresada desde el día del accidente con pronóstico crítico extremo. Sobre las dos sobrevivientes que quedan, Carlos Alberto Martínez, director del hospital, informó que Emiley Sánchez, de 39 años, tiene quemaduras en el 41% de su cuerpo. Mientras que Mailén Díaz, de 19 años, está con pronóstico reservado.
El vuelo DMJ-972 de Cubana de Aviación y operado con un Boeing 737 de la aerolínea mexicana Global Air se estrelló el 18 de mayo con 113 personas a bordo poco después de despegar del aeropuerto de La Habana, por causas que aún se investigan.