Hace dos años la mascota de la familia atacó a Valentina, cuando tenía cuatro años, y le dejó marcas aún visibles en el rostro, contaron familiares y vecinos. La rutina del animal no era envidiable: pasaba todo el día atado a un árbol en el patio interno de la casa, según testigos. El can tiene tres años y es considerado un animal peligroso. Los primeros resultados arrojan que el animal que mató al nene de un año y medio, es "agresivo y no sociable" según arrojó el test socioambiental realizado por la División Canes de la Policía de San Luis. Así lo confirmó su jefe, Pablo Gil.
El perro está alojado transitoriamente en la División Canes y esperan que lo trasladen a la Dirección de Zoonosis Municipal. Allí le realizarán una supervisión zoonótica para conocer si tiene rabia o si tuvo una mala crianza.
"Es muy alto para ser un Pitbull, para mí. Pero por eso debemos realizar estudios. Se nota que es un Dogo pero desconocemos su cruza", concluyó Gil en declaraciones al Diario República.